¿Las tecnologías son mascotas?
Enfoques no tan nuevos, pero mas que necesarios, para repensar la articulación tecnología/sociedad
- Alejandro Piscitelli
Un muerto que nunca se termina de morir.
Si el discurso periodístico o de divulgación e incluso las opiniones de académicos acerca de la relación entre tecnología y sociedad son tan pobres y aguachentos y parecidos a conversaciones de café, es precisamente porque no contamos ni con modelos, ni con teorías, ni con enfoques ni con metodologías que nos muestren y nos expliquen qué le hace la tecnología a la sociedad y qué le hace la sociedad a la tecnología en su creciente, porosa y dinámica interrelación.
Si cada vez hay más estudios empíricos de usos de las tecnologías, si cada vez son más omnipresentes y parece imposible no suponer que su presencia está cambiándolo todo, desde los usos del espacio doméstico, hasta la propia subjetividad; desde los ambientes de trabajo hasta la propia economía moral de los hogares; desde los formatos educativos a los televisivos y la lista sigue y sigue, por algo será.
Pero es mucho lo que se dice y recita y muy poco lo que se sabe de sus usos concretos, de los cambios percibidos, de la modificación en los patrones cognitivos y sobre todo de los esquemas de apropiación de las tecnologías y de cómo estos alteran (o no) los modos tradicionales de pensar, ver, entender, argumentar, narrar, articular, decidir y, sobretodo, imaginar. leer más>
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